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Lee cuando estés alerta y atento. Tu mente será capaz de concentrase mejor a ciertas horas del día y de concentrarse en aspectos importantes para retener la información.

Lee cuando tu mente esté disponible para concentrarse..

Relájate y ponte cómodo. Si estás a la carrera por terminar de leer, no serás capaz de poner toda tu atención.

Los detalles entrarán en tu mente pero no estarán comprometidos con la memoria.

Cuando quieras retener lo que estés leyendo, asegúrate de tener suficiente tiempo disponible.

Separa los detalles importantes de los detalles triviales. A menos que estés leyendo un artículo muy denso, probablemente encuentres muchas palabras superficiales y frases que no sean muy importantes.

Ábrete paso a través de la lectura y concéntrate en las partes que sean interesantes o importantes.  

Haz pausas de vez en cuando para asimilar lo que estás leyendo. En lugar de leer el artículo de principio a fin, haz pausas periódicas para pensar en retrospectiva acerca de lo que acabas de leer.

En particular, deberías hacer pausa y reflexionar cuando acabes de leer un pasaje importante que sepas que quieres retener.

Al reflexionar, estás esencialmente repasando la información dos veces y eso ayuda a retenerlo en la memoria.

Toma notas conforme vayas leyendo. Cuando lees un artículo, tomar notas puede parecer algo raro de hacer.

Sin embargo, al escribir la información utilizas un área diferente de tu cerebro a la que usas cuando lees, lo que significa que estarás reforzando los conceptos por segunda vez.

Esto ayuda tremendamente con la retención y la memoria

Haz un esquema con el material que estás leyendo. Conforme lees, usa frases cortas para esquematizar el pensamiento del autor.

Esto es similar a tomar notas, ya que conlleva al uso de una parte separada de tu cerebro y hace que seas un lector activo.

Un esquema te ayudará a comprender mejor, lo que resultará en mejor retención.

Vuelve a leerlo y repásalo cuando hayas terminado tu primera lectura. Al leer el material por segunda vez sabrás exactamente que esperar y en que concentrarte.

Utiliza más tiempo para las áreas que no comprendiste y sáltate las partes que te quedaron claras.

Al leerlo por segunda vez, serás capaz de retener la información y tendrás mejores oportunidades de ello.